El Día de la Iglesia diocesana es un día para celebrar que “juntos logramos una parroquia viva, apasionada por Jesucristo y entregada a los demás”. Cada año, esta campaña, nos recuerda que en la parroquia nacemos a la fe y en ella descubrimos que somos una familia, la de los hijos de Dios.
Además, esta jornada, es un momento especial para recordar que “la actividad celebrativa, pastoral, evangelizadora, educativa y cultural de la Iglesia es posible gracias a las 41 millones de horas al año que se entregan de manera generosa”.
Cuatro alternativas de colaboración
- Nuestra oración: tu oración es necesaria y será el alma de toda la actividad que se realice. Con ella, los frutos serán mayores y más permanentes.
- Nuestro tiempo: Dedica algo de tu tiempo en tu parroquia a los demás. El tiempo que puedas: media hora, una, tres horas… Lo que se ajuste a tu situación de vida.
- Nuestras cualidades: Cada uno puede aportar un poco de lo que sabe: una sonrisa cercana, una mano que apoya un hombro desconsolado, remangarse cuando sea necesario, acompañar en silencio al que sufre.
- Nuestro apoyo económico: Haz un donativo.
Y con motivo de este Día de la Iglesia diocesana, el cardenal Carlos Osoro, arzobispo de Madrid quiere “daros las gracias a todos los que formáis la Iglesia que peregrina en Madrid –laicos, sacerdotes y religiosos– porque juntos hemos seguido y seguimos mostrando el rostro del Señor”.
CALENDARIO DE JORNADAS Y COLECTAS EN ESPAÑA, aprobado en la LXXVI Asamblea Plenaria del episcopado español, celebrada del 23 al 27 de abril de 2001.
